Investigando fuerzas de la naturaleza que están fuera de nuestro control, este ciclo de exposiciones se centra en desastres provocados por el ser humano, abordando la inmediatez del cambio climático y la amenaza de explosiones nucleares, y amplificando mensajes y voces críticas. Rojo vivo, urgente, como si estuviera a punto de combustionar, cuatro exposiciones separadas se unen para crear un ardiente Anillo de Fuego, dibujando una constelación inesperada de artistas internacionales reunidos por primera vez: el franco-suizo Julian Charrière, la estadounidense de origen ruso Ebecho Muslimova, la española Ana Montiel y la exhibición colectiva Artists Against the Bomb organizada por Estudio Pedro Reyes.

Cada exposición dentro de este capítulo hace eco de uno de los cuatro tipos principales de combustión: lenta, rápida, espontánea y explosiva. Desde lo vertiginoso hasta lo contemplativo, la exposición de Julian Charrière aborda los peligros apremiantes de una combustión rápida debido al cambio climático, explorando notablemente el delirio de la industrialización y su colusión con recursos no renovables. Ebecho Muslimova y su burlesco, característico personaje femenino Fatebe se apoderan de las paredes de LagoAlgo, explotando su arquitectura, con paredes que apenas pueden contener su presencia, como una combustión femenina espontánea. En un espíritu de protesta explosiva e indignación, Artists Against the Bomb reúne cientos de pósters diseñados por artistas, tanto históricos como de nueva creación, que abogan por el desarme nuclear universal para generar un cambio imperativo y urgente, y lograr la paz. Mientras tanto, las vibrantes masas de Ana Montiel realizan una especie de sinestesia, pintando con aire los factores que a menudo pasamos por alto, las cosas que no consideramos. A modo de combustión lenta, emanando como calor sin llamas, ella reconcilia lo liminal y lo tangible, lo eterno y lo efímero, lo monumental y lo microscópico, lo natural y lo cultural.

Jérôme Sans, Director Creativo

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